The Fort Worth Press - Científicos cartografían el lecho marino, más desconocido que la Luna

USD -
AED 3.67265
AFN 70.546592
ALL 91.203808
AMD 391.740403
ANG 1.801057
AOA 912.000367
ARS 1062.293889
AUD 1.580804
AWG 1.8
AZN 1.70397
BAM 1.793596
BBD 2.017616
BDT 121.412753
BGN 1.79727
BHD 0.377039
BIF 2961.115187
BMD 1
BND 1.333804
BOB 6.905691
BRL 5.744604
BSD 0.999271
BTN 86.863258
BWP 13.615125
BYN 3.270196
BYR 19600
BZD 2.007309
CAD 1.43875
CDF 2876.000362
CHF 0.882785
CLF 0.024242
CLP 930.290396
CNY 7.23785
CNH 7.239504
COP 4097.1
CRC 499.227408
CUC 1
CUP 26.5
CVE 101.120195
CZK 22.998504
DJF 177.720393
DKK 6.858404
DOP 62.834427
DZD 133.641252
EGP 50.468299
ERN 15
ETB 131.257916
EUR 0.91555
FJD 2.29104
FKP 0.772529
GBP 0.772678
GEL 2.77504
GGP 0.772529
GHS 15.489658
GIP 0.772529
GMD 72.000355
GNF 8641.029991
GTQ 7.703912
GYD 209.078278
HKD 7.77515
HNL 25.557711
HRK 6.925804
HTG 131.05178
HUF 367.030388
IDR 16328
ILS 3.646745
IMP 0.772529
INR 86.948404
IQD 1309.158608
IRR 42100.000352
ISK 134.460386
JEP 0.772529
JMD 156.497178
JOD 0.70904
JPY 148.64904
KES 129.450385
KGS 87.450384
KHR 4003.980136
KMF 451.850384
KPW 900.107477
KRW 1451.090383
KWD 0.30807
KYD 0.83281
KZT 500.836837
LAK 21647.72128
LBP 89540.03329
LKR 296.189646
LRD 199.862436
LSL 18.182085
LTL 2.95274
LVL 0.60489
LYD 4.810417
MAD 9.671373
MDL 17.783301
MGA 4659.693786
MKD 56.527931
MMK 2098.782746
MNT 3473.100493
MOP 8.000055
MRU 39.712039
MUR 45.150378
MVR 15.410378
MWK 1732.842384
MXN 19.928504
MYR 4.446504
MZN 63.903729
NAD 18.182585
NGN 1553.770377
NIO 36.773809
NOK 10.755555
NPR 138.979756
NZD 1.741816
OMR 0.385146
PAB 0.999344
PEN 3.665734
PGK 4.107535
PHP 57.322038
PKR 279.925902
PLN 3.842421
PYG 7934.739246
QAR 3.64225
RON 4.574304
RSD 107.660373
RUB 85.192859
RWF 1403.796772
SAR 3.750568
SBD 8.411149
SCR 14.325475
SDG 601.000339
SEK 10.129415
SGD 1.337604
SHP 0.785843
SLE 22.830371
SLL 20969.501083
SOS 571.171783
SRD 36.319038
STD 20697.981008
SVC 8.743816
SYP 13001.985554
SZL 18.188488
THB 33.550369
TJS 10.892742
TMT 3.51
TND 3.087363
TOP 2.342104
TRY 36.482804
TTD 6.785054
TWD 32.941038
TZS 2660.000335
UAH 41.453548
UGX 3662.556912
UYU 42.589485
UZS 12944.37541
VES 64.09537
VND 25515
VUV 123.23919
WST 2.767377
XAF 601.566376
XAG 0.0296
XAU 0.000335
XCD 2.70255
XDR 0.752496
XOF 601.555343
XPF 109.363179
YER 246.750363
ZAR 18.19985
ZMK 9001.203587
ZMW 28.605885
ZWL 321.999592
Científicos cartografían el lecho marino, más desconocido que la Luna
Científicos cartografían el lecho marino, más desconocido que la Luna / Foto: © AFP/Archivos

Científicos cartografían el lecho marino, más desconocido que la Luna

Los fondos marinos cubren tres cuartas partes del planeta, pero están menos cartografiados que la Luna. Sin embargo desde hace años, una iniciativa global trabaja para obtener una imagen clara de esta parte tan desconocida del mundo.

Tamaño del texto:

Entender las profundidades de los océanos es crucial para la instalación de cables submarinos, para calcular las trayectorias de los tsunamis o para proyectar cómo se elevará el mar ante el calentamiento del clima.

Cuando la iniciativa Seabed 2030 (Fondos Marinos 2030) se puso en marcha en 2017, solo un 6% del suelo oceánico estaba adecuadamente cartografiado.

Desde entonces, haciendo uso de datos históricos, sónares de buques industriales y de investigación y el creciente poder de las computadoras, el proyecto ha conseguido elevar ese porcentaje al 25%.

"A medida que juntamos más datos, obtenemos esta hermosa fotografía del fondo marino, es como enfocarla", afirma Vicki Ferrini, responsable del proyecto del Centro del Oceáno Índico y Atlántico.

"Empiezas a ver los detalles y los patrones, empiezas a entender los procesos oceánicos de otra forma", agrega esta investigadora del Observatorio de la Tierra Lamont-Doherty de la Universidad de Columbia.

La tecnología de los satélites nos permite ahora acercarnos a la superficie de la Luna o a un barrio situado en la otra punta del mundo, pero cuando se refiere al fondo oceánico, hay un problema básico.

"La física... El agua está en medio", dice Ferrini.

Aunque hay algunos instrumentos que pueden llegar a las partes más superficiales del fondo marino, para la mayor parte del océano solo se disponen de los métodos acústicos: el sónar que emite ondas hacia el lecho marino y recupera los datos de las profundidades.

Antes, la mayoría de barcos usaban sónares de un solo haz, que enviaban un solo impulso sonoro, con lo que solo podían ofrecer datos de un lugar cada vez.

Ahora, los sónares multihaz son habituales, explica Martin Jakobsson, decano de ciencia terrestre y medioambiental en la Universidad de Estocolmo y codirector del centro Ártico y Pacífico Norte de Seabed 2030.

"Consigues una franja, casi como una vista en 3D directamente, y esto es exactamente lo que queremos para cartografiar el océano".

- "Más geopolítico que nunca" -

Pero la disponibilidad de esta tecnología no ha conducido a un centro de intercambios de datos ni a un formato estandarizado de esta información.

Los barcos recogen estas imágenes en distintas resoluciones y la captura de los datos puede verse afectada por la turbidez del agua o las mareas.

Para filtrar, corregir e integrar los datos entra en juego la iniciativa Seabed 2030.

"Tenemos un auténtico embrollo", dice Ferrini. "Damos lo mejor para entretejerlo todo (...) asegurándonos de que normalizamos y justificamos todas las mediciones".

El proyecto se ha fijado objetivos de resolución relativamente amplios para el cartografiado, con celdas del tamaño de 400 metros cuadrados para la mayor parte del océano, pero incluso así es un proceso complicado.

"Es una cuestión de coste" porque la "gente no sabe por qué es necesario", explica Jakobsson. "Y ahora es más geopolítico que nunca antes", especialmente en el disputado océano Ártico, apunta.

- "Simplemente hermoso" -

El proyecto se ha beneficiado de algunos avances tecnológicos, como los mismos sónares multihaz o la mayor potencia de computación de los ordenadores.

El aprendizaje automático de las máquinas ayuda también con el procesado de datos y el reconocimiento de patrones, e incluso puede ayudar a mejorar las imágenes y tratar de rellenar algunos vacíos.

"A medida que empezamos a juntar cada fragmento y completamos la imagen (...), empezamos a ver estos increíbles canales serpenteantes en el lecho marino que parecen exactamente como lo que vemos en la tierra", explica Ferrini. Es "simplemente hermoso", agrega.

Parte del proyecto, financiado por la organización sin fines de lucro japonesa Nippon Foundation, ha sido encontrar los principales vacíos en el conocimiento del lecho marino, normalmente en mar abierto y zonas alejadas de las rutas comerciales más habituales.

Plataformas autónomas y flotantes equipadas con un sónar podrían acelerar la recolección de datos, aunque por ahora el descubrir datos "ocultos" que no han sido compartidos está ayudando a rellenar muchos huecos.

Su trabajo coincide con el debate en la comunidad internacional sobre si abrir el lecho marino para explotar minerales usados en la transición energética.

La cuestión genera discrepancias y muchos científicos, como la misma Ferrini, reclaman no llevar a cabo estas operaciones sin antes disponer de más investigaciones sobre sus consecuencias. "Necesitamos tener datos para tomar decisiones informadas y todavía no los tenemos", dijo.

L.Holland--TFWP