The Fort Worth Press - Pasado, presente y futuro del Tíbet a los 65 años de su fallido levantamiento

USD -
AED 3.673009
AFN 67.971736
ALL 90.000036
AMD 386.889847
ANG 1.803902
AOA 908.497771
ARS 974.236706
AUD 1.483272
AWG 1.8
AZN 1.641137
BAM 1.782123
BBD 2.020994
BDT 119.613105
BGN 1.78258
BHD 0.37682
BIF 2904.352976
BMD 1
BND 1.304298
BOB 6.916818
BRL 5.536203
BSD 1.000929
BTN 83.993129
BWP 13.266515
BYN 3.275776
BYR 19600
BZD 2.017595
CAD 1.365598
CDF 2875.000307
CHF 0.857765
CLF 0.033838
CLP 933.690063
CNY 7.058099
CNH 7.06013
COP 4231.08
CRC 518.801308
CUC 1
CUP 26.5
CVE 100.471995
CZK 23.081979
DJF 178.244706
DKK 6.7988
DOP 60.207921
DZD 133.03298
EGP 48.5505
ERN 15
ETB 121.515444
EUR 0.911665
FJD 2.221302
FKP 0.761559
GBP 0.764275
GEL 2.71986
GGP 0.761559
GHS 15.92572
GIP 0.761559
GMD 67.496143
GNF 8638.488242
GTQ 7.7426
GYD 209.317795
HKD 7.77131
HNL 24.999733
HRK 6.799011
HTG 131.90648
HUF 363.910049
IDR 15593.5
ILS 3.763399
IMP 0.761559
INR 83.95715
IQD 1310
IRR 42099.999732
ISK 135.560006
JEP 0.761559
JMD 158.059226
JOD 0.708697
JPY 148.510502
KES 129.139919
KGS 85.0611
KHR 4059.151542
KMF 449.225018
KPW 899.999433
KRW 1342.094982
KWD 0.30651
KYD 0.834207
KZT 487.867329
LAK 22101.949422
LBP 89637.70559
LKR 293.27429
LRD 193.192432
LSL 17.479976
LTL 2.95274
LVL 0.60489
LYD 4.787331
MAD 9.807501
MDL 17.617204
MGA 4592.255125
MKD 56.147832
MMK 3247.960992
MNT 3397.999955
MOP 8.015782
MRU 39.626252
MUR 46.020421
MVR 15.354979
MWK 1735.656167
MXN 19.34625
MYR 4.284051
MZN 63.84983
NAD 17.479976
NGN 1620.780198
NIO 36.838101
NOK 10.718298
NPR 134.377192
NZD 1.64006
OMR 0.385
PAB 1.000948
PEN 3.72865
PGK 3.933431
PHP 57.009593
PKR 277.697717
PLN 3.924947
PYG 7803.331268
QAR 3.640503
RON 4.536798
RSD 106.678985
RUB 97.003966
RWF 1366.287016
SAR 3.754661
SBD 8.299327
SCR 13.602534
SDG 601.495472
SEK 10.350595
SGD 1.30357
SHP 0.761559
SLE 22.847303
SLL 20969.494858
SOS 572.027335
SRD 31.694249
STD 20697.981008
SVC 8.758486
SYP 2512.529936
SZL 17.473667
THB 33.4445
TJS 10.650368
TMT 3.5
TND 3.069606
TOP 2.3421
TRY 34.269695
TTD 6.785731
TWD 32.175998
TZS 2724.999627
UAH 41.215661
UGX 3678.460459
UYU 41.377551
UZS 12799.999744
VEF 3622552.534434
VES 37.027764
VND 24832.5
VUV 118.722009
WST 2.797463
XAF 597.67747
XAG 0.032725
XAU 0.000382
XCD 2.70255
XDR 0.744601
XOF 597.693808
XPF 109.175028
YER 250.325014
ZAR 17.57606
ZMK 9001.2026
ZMW 26.548826
ZWL 321.999592
Pasado, presente y futuro del Tíbet a los 65 años de su fallido levantamiento
Pasado, presente y futuro del Tíbet a los 65 años de su fallido levantamiento / Foto: © AFP/Archivos

Pasado, presente y futuro del Tíbet a los 65 años de su fallido levantamiento

A sus 88 años, el dalái lama asegura que todavía le quedan décadas de vida por delante. Pero cerca del 65 aniversario de la fallida revuelta del Tíbet, sus seguidores se preparan para un incierto e inevitable futuro sin él.

Tamaño del texto:

Muchos temen que Pekín nombre a su sucesor para reforzar su control en esta región en el norte del Himalaya, que durante siglos alternó periodos de independencia y de control chino.

El gigante asiático considera esta meseta "parte" de su país. Sus tropas la ocuparon en los años 1950, o la "liberaron pacíficamente", según Pekín, que asegura haber traído infraestructuras y educación a su población.

Para quienes se opusieron al poder chino, el recuerdo es distinto. El levantamiento se produjo el 10 de marzo de 1959 y terminó con la huida hacia India del dalái lama y decenas de miles de seguidores por los puertos nevados del Himalaya.

"Nos pidieron levantarnos para resistir al ejército invasor chino y escoltar al dalái lama al exilio", recuerda el exguerrillero Tsultrim, de 95 años, que todavía conserva el porte de soldado, con un pelo canoso bien recortado y un firme apretón de manos.

En la actualidad es uno de los últimos de una generación que todavía recuerda lo que era el Tíbet libre. Y desde su experiencia, aconseja a los jóvenes tibetanos no confiar nunca en Pekín.

"Antes de que el Tíbet perdiera su independencia, éramos pastores y granjeros", explica Tsultrim a la AFP desde Dharamsala, la localidad del norte de India donde también vive el dalái lama.

"La vida era buena, vivíamos bien... Los ganaderos vendían carne y mantequilla y los granjeros cereales", cuenta.

- El pasado -

En el exilio, Tsultrim se unió a la insurgencia tibetana en el montañoso reino nepalí de Mustang en 1960, donde recibió entrenamiento, rifles y radios de la CIA.

Durante más de una década se infiltraron en el Tíbet controlado por China para tender emboscadas y hacer detonar vehículos militares.

"Éramos voluntarios con nuestro propio caballo y llevábamos nuestro rifle y nuestra comida", rememora. "Seguimos librando la guerra", agrega.

Estados Unidos usó esta guerrilla de de 2.000 hombres como un agente encubierto de la Guerra Fría.

Pero cuando la CIA cortó la financiación y el dalái lama llamó a los guerrilleros a dejar las armas y seguir la vía pacífica que él pregonaba, Tsultrim volvió a la India.

Después de trabajar como jornalero agrícola durante décadas, se retiró a una residencia de ancianos muy cerca de donde vive el líder tibetano.

"Vine a ver al dalái lama antes de morir", dice.

Su camarada Ngodup Palden, de 90 años, también luchó contra China, pero en su caso como paracaidista de las fuerzas especiales indias en la guerra entre ambos países asiáticos de 1962.

"Antes de perder nuestro país, vivíamos cómodamente", dice observando las cumbres nevadas del Himalaya que lo separan de su tierra natal.

"Mi esperanza es volver a un Tíbet libre en vida", asegura mientras hace chasquear las cuentas de oración entre sus dedos. "Tengo algo de esperanza en mi corazón, de volver a mi tierra, mi tierra feliz", continúa.

- El presente -

Para quienes escapan ahora de Tíbet, las esperanzas de Palden son fantasías. El número de exiliados anuales ha pasado de miles a apenas una docena en 2023, afirma el gobierno tibetano en el exilio.

Los activistas aseguran que los movimientos de los tibetanos en su tierra están vigilados y muchos temen arrestos o represalias contra sus familiares si consiguen escapar.

"Me siento como un pájaro que ha estado enjaulado por mucho tiempo y ahora es libre para desplegar sus alas y volar", asegura Tsering Dawa, un exbanquero de 37 años que huyó de Lhasa, la principal ciudad del Tíbet.

Dawa abandonó su vida de clase media en 2020 por temor a ser arrestado después de hablar con periodistas de "sesiones de adoctrinamiento" chinas.

Expertos de la ONU aseguran que China dispone de centros usados para "socavar la identidad religiosa, lingüística y cultural tibetana", algo que Pekín niega.

Dawa explica que ya fue detenido en 2015 sin juicio durante casi un año en el que sufrió palizas brutales e interrogatorios que lo llevaron "al borde de la locura".

Convenció a su madre de marcharse juntos, porque si se quedaban estaban "condenados a morir". Pero "si nos marchamos, hay un 50% de posibilidades de conseguirlo".

Como las rutas para escapar a través de las montañas de Nepal están repletas de fuerzas de seguridad chinas, preparó una pequeña bolsa y pretendió que él y su madre de 68 años eran "turistas que iban de vacaciones".

Intentando esconder su miedo, sonrieron y se tomaron fotografías en el aeropuerto de Lhasa, donde empezó un largo viaje que finalmente los llevaría a India.

Desde su diminuto apartamento de una habitación, el exbanquero explica que dejó atrás 600.000 yuanes (83.000 dólares) en su cuenta, dos casas y un coche. "El motivo por el que salí fue mi voluntad de sacrificarlo todo".

- El futuro -

Las jóvenes generaciones nacidas en el exilio también ven el futuro con incertidumbre.

"China está empeñada en nombrar a su propio dalái lama cuando muera", asegura Tenzin Dawa, una activista de 31 años por los derechos del Tíbet. Nacida en India, ahora dirige el Centro Tibetano de Derechos Humanos y Democracia.

Le preocupa que las nuevas generaciones hayan perdido la esperanza de ver el hogar de sus ancestros y busquen oportunidades en otros lugares, lo que debilita la causa del Tíbet.

"Crecimos apátridas en India (...) y nunca se sabe qué puede pasar cuando su santidad el dalái lama fallezca", reflexiona. "Por eso vemos mucha emigración de tibetanos a Europa y Norteamérica".

De hecho, desde 2011, decenas de miles de tibetanos marcharon de India, según las cifras gubernamentales. "Es una gran preocupación", asegura la activista. "Son las jóvenes generaciones las que tienen que conservar el movimiento".

G.Dominguez--TFWP